


Una preciosa inspiración.
Con la respuesta de Steiner en su mente, el Dr. Hauschka desarrolló un procedimiento para conservar los extractos de plantas medicinales sin emplear alcohol. Aprovechando la fuerza de la polaridad natural, la alternancia rítmica de la luz y la oscuridad, del frío y el calor, del movimiento y el reposo. Actualmente seguimos elaborando nuestros extractos, esencias y tinturas siguiendo este procedimiento rítmico básico. Rítmicamente preparamos nuestras mezclas y agitamos nuestros preparados, por ejemplo, para la elaboración de las curas cutáneas. Los ritmos de las estaciones marcan también el calendario de trabajo en nuestro jardín de plantas medicinales.
El ritmo como medio de comunicación.
El ritmo no es un fin en sí mismo. El ritmo es un camino para ponerse en contacto con el propio cuerpo. Como todos los organismos vivos, el cuerpo conoce y vive diversos ritmos. Tomemos como ejemplo la piel:
Estos son los ritmos con los que armonizamos nuestra cosmética: la aplicación regular de los productos Dr. Hauschka favorece el ritmo de regeneración de tu piel. Tu piel se activa y estabiliza. Durante el día en tu piel actúan los productos de tratamiento nutritivos e hidratantes, por la noche recomendamos aplicar un tratamiento sin grasa, para no alterar los procesos metabólicos de la piel. A través de tu piel se pueden activar ritmos, ciclos y un equilibrio a niveles más profundos, como es el sistema linfático. Las esteticistas naturales Dr. Hauschka son expertas en materia de estimulación de la linfa. Pueden transmitir impulsos armonizadores y regeneradores a tu cuerpo, que van desde la raíz del cabello hasta los pies y te regalan el placer de la armonía vital. Aprovechando los ritmos, activamos las fuerzas intrínsecas del cuerpo.