


¿Dónde nace la fuerza vital? ¿Cómo se puede acrecentar?
Lo realizamos a base de una multiplicidad de impulsos: ritmos que infundamos a los medicamentos WALA y a los productos cosméticos Dr. Hauschka. Labores de asesoramiento gratuitas para nuestros proveedores de materias primas que están implantando el cultivo biodinámico o la agricultura Demeter. Subvenciones para nuestros empleados en concepto de ayudas para pagar la guardería o la escuela. Los preparados con los que vivificamos el compost que se reutiliza de nuevo para regenerar el suelo. Todos estos impulsos tienen un denominador común: reconocer las interrelaciones, los nexos de unión y asumir responsabilidades, sin por ello limitar a nadie.
„La salud de un colectivo de personas que colaboran es mayor en cuanto el individuo reclame menos frutos para sí mismo de lo que ha producido con su propio rendimiento; esto significa que cuantos más frutos se repartan entre los colaboradores, más se podrán satisfacer las propias necesidades, no con el propio rendimiento, sino por el rendimiento de los demás.“
Rudolf Steiner
Buena base para buenos productos.
Muchos pequeños impulsos crean una base que estimula y equilibra al mismo tiempo, que da sostén y fortalece la confianza en las propias fuerzas. Esta son los pilares fundamentales para elaborar las fórmulas de nuestra cosmética Dr. Hauschka que estimula la actividad propia de la piel y para nuestros medicamentos WALA que a base de fortalecer las defensas propias del organismo, despiertan las capacidades internas de sanación.
Esta es la base con la que nos relacionamos con nuestros empleados, suministradores y clientes. Por ejemplo:
- Escogiendo ingredientes que provengan en lo posible de cultivos biodinámicos o de agricultura ecológica controlada, extendemos esta forma de agricultura que trabaja sin abonos ni pesticidas químicos y que favorece la fertilidad del suelo y preserva la biodiversidad, respetando el equilibrio natural y reforzando al organismo tierra en su totalidad.
- En materia de cultivos ecológicos actuamos no solo por convicción, sino con experiencia avalada en este campo: cultivamos un jardín de plantas medicinales con procedimientos biodinámicos y una explotación agrícola Demeter. Estamos contentos de transmitir nuestros conocimientos prácticos iniciando y promoviendo numerosos proyectos de cultivo ecológico en muchos países del mundo.
- Con nuestras empresas asociadas tanto si son suministradores de aceite de ricino en Asia, como de manteca de karité en África o se dedican al embalaje de productos en Europa, establecemos colaboraciones a largo plazo. Estamos vinculados a ellos con relaciones de comercio justo caracterizadas por la confianza recíproca y la oportunidad de desarrollarse de forma autónoma. Si nuestros socios agricultores lo desean, les enviamos asesores para responder a las consultas en materia de cultivo biodinámico.
- Nuestra empresa pertenece a la fundación WALA: a este nivel se hace también visible la idea de los impulsos de sanación desde el punto de vista de la economía empresarial –los beneficios obtenidos por nuestra empresa fluyen a la fundación que efectúa inversiones a largo plazo y redistribuye los fondos entre los colaboradores.
- Nuestros colaboradores participan en los beneficios de WALA. Afirmamos su espacio de libertad y su responsabilidad, al tiempo que asumimos también responsabilidad por su vida fuera de la empresa WALA, ofreciendo ayudas sociales voluntarias y subvencionando los gastos de las guarderías y las escuelas.
- Nos esforzamos por gestionar toda la empresa siguiendo criterios de sostenibilidad. Nos abastecemos en un 100 % de energía ecológica, hemos construido el edificio sede de la empresa con tecnologías sostenibles, ofrecemos bicicletas de servicio y comidas ecológicas. Por nuestro empeño en este ámbito, poseemos desde 1999 una certificación medioambiental.
Estos numerosos impulsos son los que caracterizan la calidad de cada uno de nuestros productos.